domingo, 4 de diciembre de 2016

Mechar según el DRAE

Pues sí, es introducir mechas de tocino gordo en la carne. Incluso en la wiki, si nos vamos a mechar encontraremos que es insertar tiras de tocino en carnes que luego se estofan. Luego miren ustedes por dónde, mechar significa eso, mechar. Y entonces, digo yo, porque a la carne simplemente cocinada, sin ni una sola mecha en su interior, se le llama mechá. Y digo más, porqué coño a los catetos de por ahí, les tiene que dar siempre por imitar nuestra manera de hablar hasta el punto de que te metes en san Google mártir y te encuentras que a la carne mechada se llaman carne mechá como dicen los andaluces. Eso lo dirán ellos, yo digo mechada, y todo el mundo que yo sepa dice mechada, carne mechada, menos los del Canal Sur, que les obliga el Régimen hablar en dialecto andaluz, que a ver qué demonios es eso. En fin.
El caso es que en estos internetes nuestros de cada día, hay como cien mil recetas de carne mechada y otras tantas de carne mechá, pero ni una tiene mecha alguna que valga. Luego vamos a hacer hoy una carne mechada como manda el sentido común, eso tan escaso en estos tiempos de redes sociales y otras gilipolleces por el estilo.

Carne mechada
ingredientes

  • un trozo de lomo de cerdo, aproximadamente de kilo o kilo y medio
  • huevo duro
  • jamón veteado
  • ajos
  • perejil
  • pimienta
  • sal
  • cebolla
  • laurel
  • azafrán
  • vino blanco


elaboración
Coge el trozo de lomo, le practicas una incisión con el cuchillo en la parte central pero sin llegar al final, por dicha abertura le metes un huevo duro partido en dos mitades, tiras de jamón veteado, y ajos muy picaditos mezclados con perejil. Ea, ya está mechada la carne, quiere decirse que la hemos mechado haciendo un agujero por el que meter la mecha de huevo, jamón, perejil y ajos.
Salpimentamos por arriba y por abajo, por todos lados, el trozo de carne que ya hemos mechado, que quede claro que está mechada.
En una cazuela capaz hacemos un refrito con cebolla y ajos más una hoja de laurel. No hace falta que se ponga la cebolla transparente ni nada, sino todo lo contrario, en cuanto le damos dos vueltas al refrito, ponemos la carne para ir sellándola por todos lados. Sacamos el trozo para añadir unas hebras de azafrán majadas con sal, damos otras dos vueltas y volvemos a poner la carne. Ea, vino blanco, hasta casi cubrir la carne, que la terminaremos de cubrir con agua. Al rato pasamos de nuevo por la cocina y le damos la vuelta a la carne. Al rato volvemos y comprobamos que la carne mechada ya está tierna, si no pues más agua y a seguir cocinando. Cuando la carne esté tierna se sacará y se cortará en lonchas como de un centímetro más o menos. Se sube el fuego a la salsa para que reduzca y se quede estupenda de textura, de sabor ya sabéis que esta salsa no falla nunca.
Servir con patatas fritas, o con unas verduritas escalfadas y salteadas si tenéis invitados y queréis quedar finos y elegantes, por detrás y por delante.

3 comentarios:

Susana Menéndez (gastronofilia.blogspot.com) dijo...

Muy cierto, la carne mechada casi nunca se mecha ;)

Rafael prieto dijo...

Fantástica publicación bernardo,menos mal, que queda guente cómo tu,que dicen y hacen las cosas como son.
un abrazo

Bernardo Romero dijo...

Gracias Rafael y gracias Susana. Me animáis a continuar con el objetivo de este blog, acercar de una manera sencilla a los rudimentos básicos de la cocina.