martes, 6 de septiembre de 2016

Un poco de bacalao y de sentido común

El menos común de los sentidos, pero necesario para todo. En la cocina, también. Hoy me van a permitir vuesas mercedes que vuelva a las andadas y no ande dándoles ingredientes ni tiempos ni nada de eso, sino que me vaya directamente a la filosofía de este plato. Verán como se enteran perfectamente de lo que les quiero decir y en consecuencia, añadiendo un poco de sentido común, podrán hacer un estupendo
Bacalhau à brás o douro
Piensen que para hacer este excelente plato de bacalao portugués no tienen por qué utilizar lomos extraordinarios. Incluso podrán hacerlo con recortes, aunque yo prefiero utilizar partes no demasiado nobles pero que al tenerlas un día y medio en remojo me ofrezcan un desmenuzado en láminas, cosa que con los recortes no podremos conseguir. En fin, cada cual que utilice la parte del bacalao que quiera, nosotros la parte más cercana a la cola, pero donde todavía hay fundamento para hacer un buen bacalhau à brás o al douro que es como más comunmente se le conoce.
Por un lado vamos a poner los trozos de bacalao en agua ya caliente al fuego -medio/bajo-, pero sin que llegue a hervir el agua. Con diez minutos o un cuarto de hora bastará.Reservamos para que se enfríe un poco y poder desmenuzarlo.
Por otro lato y mientras el bacalao está al fuego cortamos patatas paja y las ponemos en remojo con objeto de que luego queden sueltecitas y no se amalgamen en el revuelto final. Bien, pues cuando lleven un cuarto de hora en remojo las sacamos y las dejamos escurrir. Un vez escurridas las ponemos a freír en abundante aceite y a buena temperatura, para que queden crujientes y doradas.
En una sartén amplia se sofríe cebolla cortada según el gusto de cada cual, a mí me gusta más bien fina porque le doy poca cocción en el refrito, quiero decir que en cuanto empieza a ponerse transparente le echo el bacalao desmigado encima. Dos vueltas y media y el mogollón de patatas paja por encima. Ahora una vuelta solo y un par de huevos batidos por encima, a mover con la cuchara de madera dos veces, pacá y pallá, ya está. Se apaga el fuego y se mueve ahora otro par de veces o tres como mucho, porque simplemente ya está. Adornamos con perejil y aceitunas negras para que quede mono y se acabó. Ni sal ni pimienta ni sandiós bendito. Es un revuelto de bacalao con patatas y ya está, solo que formidable. Ea, troncos, hasta luego que me voy al curro.Condieu.

2 comentarios:

El Pincho Moruno dijo...

Compadre has clavado uno de mis platos "prefe" y es que a mi el bacalao de tos los colores. Te voy a recomendar un sitio donde se come Bacalhau à Brás entre otros manjares. Esta en Monte Francisco; saliendo de España en vez de tirar a la izquierda para Villareal, tiras a la derecha y a 1-2 kms esta el cruce para este pequeñisimo pueblo del Algarve. Es el pueblo donde nació la madre de Paco de Lucia y yo suelo visitarlo con frecuencia pues es un sitio para comer como se comía antaño. Entre otros hay un restaurante que se llama "Refugio Dos Cacadores" al que voy cuando quiero comer a la carta a buen precio y el otro es "Sabores Da Beira" que es una típica casa de comida para manducar un extraordinario y consistente menú de comida casera y típica portuguesa a un precio mas que aceptable. Es mejor in en época no estival y estar preparado a compartir mesa con algún parroquiano. En el menú hay un día que entra el Bacalhau à Brás y los postres son magníficos.-

Un abrazo y perdón por el rollo que te he colocado.-

Bernardo Romero dijo...

Anda que no. El Refugio dos Caçadores lo conocía, me lleva un amigo de vez en cuando que es fan total del lugar. Me encanta volver a los orígenes y aunque me gusta lo que están haciendo algunos cocineros (aquí en Huelva no te pierdas el Puro Chup Chup, La Mirta, La Bohemia y el Guatiné), sigo apostando por lo tradicional cuando se elabora con sentido común y buenos productos. En fin, gracias por las recomendaciones don Pincho.