jueves, 4 de diciembre de 2008

El pimentón más que un exorno

Hice unos chocos con papas, al modo tradicional, eso que siempre hemos oído nombrar chocos en amarillo, y se me ocurrió echarle un poco de pimentón por encima cuando los fui a servir. En principio fue para dar un toque de contraste cromático al plato, pero no os podéis imaginar lo bueno que están con este añadido que no es meramente visual, sino gustativo. No es una novedad esto de echar pimentón por encima de un plato ya cocinado, y ahí está el pulpo a la gallega para refrendar lo que digo, así que os animo a hacer este plato con este pequeño pero extraordinario en sus resultados complemento. Ahí van mis
Chocos con patatas.- Con media cebolla de las grandes, un pimiento verde de los de freír, dos dientes de ajo y dos hojas de laurel, hacemos un refrito en el que terminarán los chocos, un par de ellos si son medianos o uno grande, una vez que los hayamos limpiado y troceado de forma no demasiado grosera, sino más bien fina. Damos unas vueltas a los chocos y añadimos pimienta, tomillo y sal, más azafrán para obtener el característico color de este guiso. Damos un par de vueltas y añadimos medio vaso de vino blanco del Condado o del que ustedes tengan a mano, que si están en Melbourne, ya me dirán como consiguen vino blanco del Condado. Bueno, pues cuando el vino empieza a evaporarse, cubrimos de agua y dejamos cocinar hasta que los chocos estén casi tiernos, momento en el cual añadimos un par de patatas troceadas no demasiado groseras, sin educaditas y que quepan en la boca tranquilamente y tan ricamente.
Nada más apartar la cazuela del fuego, espolvoreamos perejil picado muy menudito por encima, y a continuación servimos los platos para que quién quiera se ponga un poquito de pimentón por encima del guiso. Lo probé ayer mismo con pimentón dulce, pero para la próxima voy a ver cómo va con el pimentón picante, que seguro que está buen también.
Un último apunte: fui estripando las patatas con el dorso del tenedor y no os podeis imaginar lo delicioso que está ese puré con el pimentón y el caldito propio del guiso. Indescriptible.

5 comentarios:

Juan Duque Oliva dijo...

Estoy de dieta y me estoy prohibiendo pasar por aquí porque vaya hambre que me entra

Un abrazo

El Pincho Moruno dijo...

Guiso marinero por excelencia.Lo mismo me da "Chocos con papas" que "Papas con chocos"......Y es que los chocos estan buenos de "tos colores" pero lo de estripar las papas con el tenedor, simplemente genial. Lo digo porque hoy precisamente me he comido unas costillas guisadas con papas. Por supuesto con las papas bien estripaitas en su caldo.

PD: Espero te haya gustado la sopa de ajos (con estos frios pega).

Saludos.-

Bernardo Romero dijo...

Mi admirado Pincho, claro que sí. Estupenda la sopa de ajos, a mi venerado padre -93 añitos- también le ha debido gustar, porque ha dejao el plato más limpio que una patena. Y a mi querido Luz de Gas, le tengo que decir que eso de las dietas es tremendamente peligroso, pues a veces incluso adelgazas y tó, de lo malísimas que son pá la salú. En todo caso, si te pasas por "frito variado" verás qué sopa de ajos se ha marcado el Pincho y luego me he marcao yo solito en mi casa. Barato, pleno de sabor y para colmo, reparaora. Si no tienes caldo, que como eres lo que no hay, pues no tendrás, te lo compras de esos que vienen en tetrabrick, que hay algunos poco buenos. En fin, un saludo a ambos dos.

El Pincho Moruno dijo...

Me alegro que os hayan gustado a ti y a tu señor padre.

Cuando las tenga bien experimentadas te voy a dedicar la receta de unas "Sopas cortijeras" que probé el otro día en plena Sierra Madrona. Una verdadera joya de la cocina rural tradicional.

Saludos.-

Damas dijo...

Gracias por tus recetas Choquero