Antier pasé por la puerta de la pescadería y vi que tenía unos chocos de trasmallo estupendos, pero como era temprano, me dije que luego a la vuelta compraba uno. Y a la vuelta me pasé primero por la frutería de Miguel, que es primo de la Érika, una alumna que tuve en Economía o en Arte, no me acuerdo en qué, pero alumna mía fue. Tenía, el Migué, no la Érika, unas habitas de esas que parecen judías verdes de las redondas, tela de chiqueninas, que ahora están de modas las cosas chicas, beibes les dicen. Pues le compré como un kilo o así. Cuando llegué a la pescadería, el hombre había vendido todos los chocos, pero me dijo que tenía congelados unos pocos y que eran iguales y además limpios. Hombre, iguales, iguales no creo que fueran, pero total, le compré un par de ellos porque eran terciaditos. El antojo de chocos con habas, pudo cumplirse y satisfacerse. Vamos allá.
Habas (tiernas) con chocos
ingredientes:
- chocos
- habas
- cebolla
- ajos
- pimiento
- cominos
- pimentón dulce
- pimienta
- sal
Refrito con media cebolla, medio pimiento verde de los de freír y un par de dientes de ajo, Los chocos, cortados y limpios, al refrito directamente. Un ratito que se hagan bien los chocos y mientras vamos cortando las puntas de las habas y dejándolas en trozos razonables. Pimentón de la Vera, dulce, pimienta y cominos majados con un poco de sal. Más sal si iba poca, que lo normal es que sí, que vaya poca, y a dar dos vueltas. Echamos vino blanco (el Espina Pura de Sauci me encanta porque además me bebo un par de vasitos en el entretanto) y dejamos que se medio evapore. Las habas que ya tenemos cortaditas, dos vueltas y agua hasta cubrir suficientemente el conjunto. Se acabó. Cada cual que considere el tiempo que estime oportuno, según gusten las habas más o menos hechas. Una delicia, palabrita del Niño Jesús.
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